Un naturalista y familia en Cantabria

Milano negro (Milvus migrans)
Julio de 2010.

Algunos sabéis como son la mayoría de mis viajes estivales en familia, tengo que conjugar el viaje deseado por un ornitólogo con el disfrute y necesidades de mis dos hijas pequeñas y mi compañera. Ello implica que hay que aprovechar las mañanas antes de que se despierte la familia para observar aves y entre visitas típicas, comidas y playas poder llevar a la familia a disfrutar algo de la naturaleza. Este verano escogimos Cantabria, buscando un lugar con posibilidades de pajararear rápido nos decidimos por Noja, para ello ayudó la preciosa playa de Trengandín de un lado y la cercanía de las marismas de Joyel, Santoña y la ría de Ajo de otro.

No nos equivocamos, primero señalar lo temperado del clima que aunque estropee el disfrute de la playa favorece las excursiones y escapadas al interior, para conocer sus bosques y campiñas. Como ornitólogo diría que Cantabria en verano es la tierra del milano negro (Milvus migrans) omnipresente en toda la campiña costera. También es destacable la presencia de busardos ratoneros (Buteo buteo) y halcón peregrino (Falco peregrinus).

Alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio)

Muy recomendable es la ría de Ajo, donde pude observar por primera vez al alcaudón dorsirrojo (Lanius collurio). En las marismas de Joyel y Santoña como más destacado señalar la reproducción del cisne vulgar (Cygnus olor) y la presencia de los primeros migrantes postnupciales con algunos ejemplares de espátula (Platalea leucorodia), de zarapito real (Numenius arquata) y aguja colinegra (Limosa limosa).

Cisne vulgar (Cygnus olor)

No tuve tanto éxito con mi segundo objetivo cántabro el pico mediano (Dendrocopos medius), lo intente por dos veces en el magnifico robledal de Ucieda, dentro de la reserva de Saja-Besaya. Estos montes esconden un robledal adulto muy recomendable pero no tuve suerte con el pícido.


Robledal de Ucieda, Saja-Besaya

Otra pequeña joya muy recomendable es el sorprendente bosque de secuoyas de Cabezón de la Sal. Se trata de una plantación de 2,5 hectáreas de sequoia (Sequoia sempervirens) localizada en el Monte de Las Navas. Fueron plantadas en los años 1940, como consecuencia de la política de autarquía que imperó durante los primeros años del franquismo. Hoy en día podemos disfrutar de 848 ejemplares de esta especie, con una altura media de 36 metros y un perímetro medio de 1,6 metros. Añadir la cercanía de la cueva de El Soplao espectacular concentración de de estalactitas, estalagmitas y macarrones excéntricos y tendréis un magnifica visita para toda la familia.


Monte de las Navas, bosque de secuoyas

Muy recomendable la comarca de Campoo de Suso en sus campiñas y sierras abundan los buitres leonados (Gyps fulvus), el halcón abejero (Pernis apivorus), alimoches (Neophron percnopterus) y cigüeñas (Ciconia ciconia). Os propongo dos excusas para llevar a la familia la primera el nacimiento del río Ebro en Fontibre y el muy didáctico y sorprendente poblado cántabro de Argüeso, sumarle una buena comida de lechazo en Reinosa y tendréis una perfecta excursión.

Poblado cántabro de Argüeso.

Mensaje de Rafa Muñoz en el FORO SVO Aves.
Fotos de Rafa Muñoz, FONS FOTOGRÀFIC SVO.


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